Hay un libro abierto siempre para todos los ojos: la naturaleza.
Jean-Jacques Rousseau

RESPETAR

Empezando por las personas, todos los espacios comunes son accesibles para personas con movilidad reducida, y estas disponen de una habitación especialmente diseñada.

La dehesa se encuentra en zona de afección y protección de la Red Natura 2000, concretamente el LIC (ES4110103) y ZEPA (ES0000190) “Encinares de los ríos Adaja y Voltoya”; así como por áreas con avifauna de importancia como es el Área sensible del Águila Imperial, y por ello las instalaciones de Caserío Fuentesclaras han sido diseñadas y pensadas especialmente para reducir el impacto ambiental, respetando los valores paisajísticos del entorno en formas, materiales y colores elegidos.

Durante la ejecución de la obra se ha perseguido en todo momento: la reducción de los consumos de recursos naturales, tanto energéticos, como de bienes escasos, ya sea agua u otras materias; la disminución del volumen de residuos generados, facilitando su reciclaje; la minimización de la contaminación de tipo edáfica y atmosférica; la minimización de la degradación de la calidad ambiental, disminuyendo las molestias por vibraciones acústicas o de otro género; y la sensibilización de los diferentes agentes intervinientes, contribuyendo a crear una conciencia que integre medidas a favor del entorno.

Contamos con un sistema de tratamiento del agua, y sistemas de ahorro de energía y de consumo de agua; y con los adelantos técnicos más avanzados en aislamiento térmico y acústico al objeto de minimizar el uso de aparatos de calor o frío.

CUIDAR

 Como decíamos, no es casual que en algunos tejados y paredes del Caserío puedan observarse nidos para favorecer la nidificación del cernícalo primilla y de otras rapaces nocturnas (mochuelo, lechuza y autillo) u otras especies trogloditas (carracas y quirópteros). Por favor, si conseguimos que aniden, aparte de celebrarlo entre todos, cuídalos mucho

Siempre que puedas, desplázate a pie, en bicicleta o en transporte colectivo. Por nuestro lado te ofrecemos bicicletas para que puedas desplazarte de manera sostenible por la dehesa y hasta Ávila. También trataremos de organizar transfers colectivos a Ávila para llevarte o traerte desde allí.

Cuida la flora y fauna de la dehesa. No cites ni incomodes a los animales. No dejes rastro, si en tu paseo generas basura, llévatela contigo. Contamos en los espacios comunes con recipientes señalizados para la separación del reciclaje y desechos.

Haz uso del agua, la energía y otros recursos naturales con moderación, teniendo presente que son bienes escasos, más aún en el campo. Piensa en el uso excesivo de jabones, detergentes o aerosoles.

Muy especialmente os pedimos dos favores, en la habitación y en general en las dependencias del Caserío.

Entre los diversos retos que hemos tenido que superar en este proyecto está el del abastecimiento, conducción y tratamiento del agua. Y en lo que respecta al saneamiento, el reto de construir una fosa séptica para el tratamiento ecológico de las aguas residuales.

Y esos son los favores que os pedimos. El primero, que seáis por favor muy cuidadosos con el consumo descontrolado de agua. Ávila ha sufrido recientes episodios de sequía muy severos, y es necesario concienciar, sobre todo a nuestros hijos, de lo importante que es no malgastar el agua.

Y el segundo, de extraordinaria relevancia para nosotros y aún más para las instalaciones del Caserío. Debemos rogaros encarecidamente que hagáis uso de los distintos recipientes destinados a basura, y no arrojéis por el inodoro nada distinto de papel higiénico. El listado de cosas que NO DEBEN TIRARSE por el inodoro es conocido, pero lamentablemente debe ser aún más recordado desde un alojamiento hotelero en mitad del campo: NO papeles no higiénicos, cartón, plástico, toallitas, tampones, compresas, pañales, profilácticos, cristales, ropa, etc. Más allá de poder causar graves desperfectos en el sistema de saneamiento y conducciones, puede incomodarse además a uno mismo y a otros clientes. Gracias adelantadas por ayudarnos.

 DISFRUTAR

Disfruta de la naturaleza en silencio.
Siente la caricia del sol (eso sí, con protección), y del viento.
Cuenta los millones de estrellas que llegan a tus ojos.
Sube a una roca (con cuidado) y aprecia el cambio de perspectiva.
Mira cómo se comportan las aves que nos rodean.
Echa la caña en el embalse y espera.
Escucha el aire que pasa entre las ramas de las encinas.
No hagas nada. Solo respirar hondo.